Hace muchos años, cuando estaba en la Universidad, tenia una novia, estaba profundamente enamorado de ella y la acompañaba a casa cuando terminaban mis clases, era lo minimo que un novio debe de hacer por su amada, al principio no habia problema, ella vivia en Santo Domingo, la colonia adyacente a CU, pero despues su familia consiguio una casa en la colonia Zapotitla, en el lejano Tlahuac, asi que irla a dejar hasta alla se convirtio en una rutina agotadora, si saliamos a las seis de la tarde de la facultad, llegabamos hasta las nueve o diez de la noche, en lo que platicabamos o cenabamos, yo estaba de regreso en Taxqueña poco antes de las doce de la noche, en aquella epoca tenian la costumbre de tocar en el sonido ambiental de las estaciones la cancion Last Train to London, ( El Ultimo Tren a Londres ), de Electric Light Orchestra, cuando salia el ultimo tren, justo a la medianoche. Asi que esa cancion me acompañaba de lunes a viernes, esos viajes eran memorables en mas de un sentido, los vagones solitarios, la noche silenciosa, no mas que el ruido de los metales chirriantes, poco a poco fui conociendo a mis compañeros de viaje, siempre me bajaba en Hidalgo y lo mismo hacia un señor ya mayor, que subia en Ermita, en cambio en San Antonio Abad subia una mujer que vestia siempre muy provocativamente, pero que se cubria con un pesado abrigo, como para decir, ya no estoy trabajando; en Allende, en cambio se subia un Transexual, demasiado masculino como para pasar como una delicada mujer, los conocia de vista y ellos a mi, pero jamas intercambiamos una sola palabra.
Muchos años despues, un dia estaba en Inglaterra, para ser mas preciso en Cottersmore, se me habia hecho muy tarde y tenia que regresar a Londres, efectivamente, tome el ultimo tren a Londres, y en mi walkman traia ese cassette, fue un boleto al viaje de los recuerdos, la recorde a ella, las razones por las que terminamos, las memorias de mis viajes en el Metro del DF, y la absoluta seguridad de que fui muy sonzo, el tiempo y dinero que desperdicie en esos viajes hubiera sido mejor utilizado si nos hubieramos ido a vivir juntos desde esa epoca, por otro lado si ella se hubiese embarazado, nunca hubiese podido viajar como lo hice despues, como casi toda relacion donde solo uno de los dos ama, termino, terminaron tambien mis viajes en la madrugada en el metro y comenzaron mis viajes en aeropuertos de otras tierras.
Autor: Sergio Antonio Tellez Morales