Se ha hecho costumbre que se reserven vagones exclusivos para las mujeres en el metro, los metrobuses y otros transportes publicos, la idea parecia buena en principio, evitar el hostigamiento sexual de los hombres, y la verdad, hay que reconocer que hay muchos pervertidos libres por todas partes, pero en ningun modo todos los hombres somos asi, y eso debe de quedar bien establecido.
Pero la idea, de evitar el hostigamiento, poco a poco se esta convirtiendo en segregacion, a los hombres en el metrobus ya nos toca una pequeña parte de atras, menos del 36% del autobus, igual que a los negros de Alabama en lo peor de la discriminacion, como es normal en esta situaciones, las feministas cumplidas sus primeras demandas, caen en una espiral de exigencias, cada vez mas alocadas, y al final terminan haciendo las cosas por simple odio al hombre.
Regresando al Metro, la idea de separacion se esta volviendo absurda, las mujeres estan dejando de abordar sus vagones, y se estan subiendo a los de los hombres, ahora cuando uno viaja en las horas pico, se encuentra que otra vez hay muchas mujeres en nuestros vagones, las razones son muchas, la primera, aunque hay algunos pervertidos, el hostigamiento es mas bien un fenomeno raro, como de uno en diez mil, pero en cambio los hombres somos mas decentes y corteses, cuando el vagon va muy lleno, somos muy considerados con ellas, si hay un asiento, regularmente lo cedemos, muy a diferencia de los vagones de mujeres, donde la violencia es algo comun, y las peleas, uñas, mordizcos y tacones se usan con mucha liberalidad, hay que reconocerlo, las mujeres son mucho mas violentas que los hombres, y la lucha por los asientos se vuelve salvaje. Para demostrar el hecho, si te subes en un vagon de hombres en Centro Medico, o en un Metrobus de la linea 1, en hora pico, veras que casi todos los asientos van ocupados por mujeres.
Y si eso fuera poco, resulta ahora que las lesbianas son mas agresivas que los hombres, y mucho mas pervertidas, no es raro que alguna de ellas rechazada en sus avances por una mujer, la emprenda contra ella, a veces a golpes, ahora es menos peligroso para las mujeres, viajar en los vagones de hombres que en los de las mujeres. ¿Quien entiende este loco mundo?
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